viernes, 29 de abril de 2016

4.4. Reflexión

En primer lugar, quiero comentar que es mi primera experiencia de trabajo en equipo de esta manera, sin ser presencial ni conocernos previamente. Aunque tenemos un foro, he echado en falta poder intercambiar opiniones coincidiendo en el tiempo. No obstante me parece una herramienta válida para trabajar en grupo, pero me parece imprescindible hablar, debatir, contrastar opiniones y consensuar en vivo.

El contenido sobre las enfermedades relacionadas con la alimentación me ha parecido muy interesante porque me ha hecho ser más consciente de las dificultades y problemas a los que se enfrentan las personas que las padecen. Es lógico que se vaya avanzando en este sentido y que se tengan que aplicar algunas medidas que les protejan y les tengan en cuenta, como la normativa sobre los alérgenos. También entiendo que no va a ser fácil implantarla  puesto que supone un gran esfuerzo y conocimientos, o desembolso, para aplicarla en negocios más pequeños o familiares (restaurantes, bares,…). Pero, en cualquier caso, implica una gran responsabilidad y no se puede ignorar.

Respecto a los mitos, errores y realidades he descubierto que si tenemos cierta formación en alimentación y nutrición nos va a dotar de criterios para discernir estos mitos o, al menos, para ponerlos en duda y contrastar la información. Creo que es un reto a nivel educativo en el que se van dando pasos pero todavía nos queda.

Pienso que detrás de todas estas Dietas milagrosas, originales, raras,… hay muchos intereses, principalmente económicos. Después de ver todos los tipos de dietas para adelgazar y de productos “mágicos” que existen, mi conclusión es que se diseñan dietas para todo tipo de personas, según los distintos valores y formas de vida; para los que quieren adelgazar rápidamente, para los que defienden una alimentación más natural, o son vegetarianos, o partidarios de…

Ante este tipo de "métodos mágicos" y "productos milagro" hay que ser críticos, no dejarnos influir y consultar siempre con especialistas, sobre todo si existe alguna enfermedad alimentaria o hay que perder peso de forma importante.


Para trabajar con mi alumnado, creo que, recopilar “mitos” para luego buscar informaciones fiables, que confirmen o desmonten dichos mitos, puede ser interesante. 

Otra actividad que se puede realizar es la de señalar en distintos menús, con números o iconos, los posibles alérgenos. Se podría realizar a partir de algún menú o recetas trabajadas anteriormente. Es una forma de ser conscientes de esa realidad que cada día es mayor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario